CAPÍTULO
9
Abrí lentamente los ojos notando que ya era un nuevo
día, de pronto recordé todo lo que anoche había sucedido y sonreí sonrojándome
y cubriendo mi rostro con la sábana de la camilla del hospital; aún no puedo
creer que Yunho y yo lo hayamos hecho en un lugar como ese.
Comencé a palpar poco a poco detrás de mi, pero no
había nadie, volteé y vi que Yunho no estaba a mi lado, ¿Se habrá ido?... no,
ahí estaba, dormido en la silla que estaba al lado de la camilla, ¿Cómo es que
se vistió tan pronto? Iba a levantarme pero por instinto me cubrí al notar mi
desnudez, encontré en el suelo mi bata, justo donde la había dejado caer unas
horas atrás, estiré la mano tomándola y decidí levantarme para colocándomela,
pero fue ahí donde un terrible dolor invadió mi cuerpo , mordí mi labio para no
gritar, me ardía mucho, aún así me levanté y me coloqué la bata volteando
siempre a ver, ya que no quería que Yunho me viera de esta manera, aunque ya me
haya visto así.
Yunho se veía tan tierno y tan pacífico cuando esta
dormido, me incliné un poco quedando frente a él y acaricié su cabello, noté
como sonreía y sonreí para él, Yunho abría poco a poco los ojos mirándome y
dándome un pequeño beso, sonreí.
―¿Dormiste bien? ―me preguntó―.
―Como un bebé ―sonreí sonrojado―.
―Me alegro mucho ―acariciaba mis mejillas, las
cuales las sentía entumecerse ante el contacto de sus dedos―, ahora debemos
irnos.
―¿Tan pronto? ―hice un pequeño puchero―.
―En poco tiempo les servirán el desayuno, y no creo
que te guste la comida del hospital, ¿O sí? ―torcí mis labios―.
―Tienes razón.
―Traje algo ―sonrió mostrándome una pequeña maleta y
ofreciéndomela, tomé la maleta y la abrí―; no se si realmente sea de tu talla,
pero se que iremos a casa, decidí traer algunas prendas desde mi casa.
No podía dejar de sonreír, incluso fue a su casa a
traer ropa para mí.
―Anda, vístete ―sonrió―.
―Pero…necesito que salgas.
―¿Por qué?... ¿y si mejor te ayudo a vestirte?
―Yunho…en verdad esto no es.. ―se acercó a mí
besando mis labios mientras sentía mi bata de
caer nuevamente―.
Acariciaba mi espalda y sentía sus labios deslizarse
hasta mi cuello atacándolo a lametones y mordidas.
―Y..Yunho…―comenzaba a jadear―…n..no…a..aquí….―lo
aparté un poco de mi― ¡Yunho!
―Lo siento, es que…me gustas tanto ―tomó una
camiseta de la maleta y me la dio―.
―Es que…este no es el lugar indicado ―tomé la
camiseta y me la puse―.
―Lo se, pero…cada vez que te veo no puedo evitar
tener tantas ganas de poseerte Jae ―no dejaba de observarme mientras me colocaba
las otras prendas―.
―Debes de controlarte Yunho ―cerré la pequeña maleta
y la coloqué sobre la camilla―.
―¿Cómo puedo controlarme Jaejoong? ¿Cómo? ―se acerco
nuevamente a mi―, ¿Cómo me controlo si cada vez que te miro me vuelves loco?
―se apegó a mi de tal forma que pude sentir su ya marcada erección en mi
trasero―.
―Yunho, debemos irnos ―lo miré y asintió separándose
de mi―.
Tomé la maleta y justo antes de salir llegaron los
médicos, me revisaron un poco y al ver que estaba perfecto, Yunho y yo fuimos
camino a casa.
―Gracias por llevarme a casa, tu ropa…
―Puedes conservarla si quieres…
―Ah…esta bien, entonces…nos vemos
―¿No me invitarás a pasar?
―Tengo que ir a la Oficina, así que no estaré en
casa.
―¿Puedo ir a la Oficina?
―¿No tienes un restaurante que atender?
―Solo decía…si no quieres verme solo dime
―Yunho, no es eso, tengo un caso que atender y es
importante ―él torció los labios―, puedes venir a la hora de la comida
―sonreí―.
―Esta bien ―sonrió un poco―, ¿A que hora?
―A las 3:00pm
―Perfecto, ahí estaré puntual ―asentí―.
―Nos vemos ―sonreí―.
―Adios.
Bajé del auto y entré a casa, entré al bano y abrí
la regadera mientras me despojaba de las prendas que Yunho me había prestado,
tomé la camiseta y la abracé sintiendo ese olor, huele justo como él.
Entré a la ducha sintiendo como el agua recorría mi
cuerpo y mi mente se proyectó, no podía dejar de pensar en él, en sus manos
tocándome, en sus labios besando todo mi cuerpo, todas las imágenes de aquella
madrugada regresaron a mí y no pude evitar sentir todo eso, como si volviera a
suceder, tomé mi miembro estimulándolo, pensando en él, solamente en él.
―Agente Kim ―sonreía la gata de Christine viniendo
hacia mi―.
―No se repetirá esto ―murmuré hacia ella, quien al
parecer lo entendió y se tornó seria―.
―Agente, hay un chico nuevo con nosotros, lo
asignaron para trabajar para ti ―abrí los ojos sorprendido―.
―Espera, ¿Qué hay de ti?
―Me temo que iré ahora con otro agente, por cierto,
el jefe quiere hablar contigo, y ¿sabes? No estaba de muy buen humor. ―tragué
saliba―.
―De acuerdo iré enseguida.
―Agente Kim Jaejoong
―Dígame ―sentía que la tensión aumentaba―.
―¿Por qué no me dijo que reabrió el caso 1312005?
―Ah… vera, lo que pasa es que…
―No me importa que excusa tengas preparada ahora,
pero este problema tienes que resolverlo antes de que alguien más lo descubra y
se haga público, su reputación y la de la agencia depende de esto
―Lo sé y lo entiendo
―Es por ello, que a partir de ahora, usted trabajará
con el nuevo agente en ese caso.
―¿Qué? Señor verá, esto pensaba resolverlo por mi
mismo, ya sabe, yo fui el que tuvo el error y…
―No, de ahora en adelante trabajará con el nuevo
agente, es una orden.
―Entiendo señor ―asentí resignado―.
―Bien, en unos momentos él estará en tu oficina, ya
puede retirarse. ―Asentí haciendo una reverencia que fue correspondida y salí
de la oficina―.
¿Cómo pueden ponerme a un nuevo agente? Incluso me
sentía bien con Christine, ella sabe más cosas, llegar a este punto con un
chico que apenas tendrá sus primeras experiencias en la agencia…
―¿Agente Kim Jaejoong?
―Sí, soy yo…¿Quién eres?
―Ah, soy el nuevo miembro del equipo, Shim Changmin
―hizo una reverencia― es un honor trabajar para usted.
―Oh, Changmin ―asentí haciendo una reverencia―, un
gusto conocerte, bienvenido a la Agencia, ¿Te han tratado bien?
―De maravilla ―sonrió―, bien, el jefe dijo que tenía
un caso especial que ambos debemos resolver.
―Ah, sí ―abrí el archivero y saqué algunos folders
ofreciéndoselos― aquí esta toda la información, revísala y después de pondré al
tanto de lo que he estado haciendo estos días.
―Entendido ―asintio―, ah.. ―mirando su reloj―,
Agente, son las 3:00pm, yo…
―¿En serio? ―me levanté y abrí un poco la puerta
asomándome y ahí estaba él, esperando, le hice una señal para que me espere un
momento y cerré la puerta ― ah. ―miré a Changmin― puedes ir a comer si gustas
―Estoy bien ―sonrió―, iré mi oficina a revisar esto.
―De acuerdo ―acompañé a Changmin hasta la puerta y
lo vi salir e hice pasar a Yunho―.
―Ah, esta oficina ―suspiró―.
―Es…grande…¿cierto?
―Sí…―asintió―.
―Salgamos a comer a otro lado.
―Vamos a mi oficina ―sonrió de lado―.
―Solo si tienes aquel pastel de chocolate que tanto
me encanta ―sonreí―.
―Todo lo que tu desees ―me sonrió besándome un poco
a lo que correspondí―.
―Vamos entonces ―susurré en sus labios separándome
un poco―.
Salimos de la oficina y fuimos hacia el restaurante
de Yunho, él pidió una rebanada del pastel de chocolate y un par de cafés, vaya
que reconocía mis gustos, fuimos a su oficina y me senté en una silla. La
oficina de Yunho es algo pequeña, pero es bueno saber que el mismo ha sabido
conseguir lo que tiene.
―¿Te gusta? ―sonríe al mirarme comer ese trozo de
pastel―.
―Delicioso ―sonreí―.
―Ah…Jae
―Dime
―Tienes un poco de chocolate ―me miraba acercándose
a mi―.
―¿Dónde?
―Aquí ―susuró acercándose más y rozando sus labios
con los míos retirándome un poco de chocolate con su lengua―.
Comenzó a besarme y yo correspondí entrelazando mis
dedos en su cabello, él acariciaba mi cuello deslizando sus dedos hasta mi
pecho y desabrochando mi camisa e introduciendo una de sus manos y acariciando
mi pecho, yo comenzaba a jadear en sus labios y comencé a desabrochar su camisa
quitándosela, el devoraba mi cuello mientras me sonrojaba soltando algunos gemidos,
sentí los brazos de Yunho tomarme y
cargarme hasta el escritorio, me recostó en él y lo tomé del rostro besándolo,
cuando un sonido llamó nuestra atención.
―Aishhh…. ―Yunho sonaba enojado y yo torcí la boca―.
―Quizás sea importante, contesta ―le dije
abrazándolo por la cintura―.
El asintió y contestó su celular.
―¿Hola?...¿Que pasa?...¿Qué?... de acuerdo iremos a
revisar
―¿Qué pasó? ―enarqué una ceja―.
―Espera ―el acceso a internet en su móvil y me
mostró unas fotografías que me alertaron―.
―Pero…¿Cómo? ..¿Qué? ―cubrí mi boca con las manos
completamente aterrado― ¿Cómo fue que…?
Habiamos sido descubiertos, una página comenzó a publicar fotos de nosotros dos, en
el hospital, fotos de aquella noche, quería morirme, si la gente se enteraba de
esto, era mi ruina, no solo mía también la dela Agencia, y la de Yunho…¿Qué
hago?
―Yunho…
―Vamos, tendremos que dar una vuelta al hospital
―Pero, ¿y mi trabajo?
―Avisa de algún imprevisto
―Esta bien ―suspiré preocupado―.
―Tranquilo, todo saldrá bien, no te preocupes ―besó
mi frente y sonreí un poco―.
―Vamos.
yunho no puede dejar de tocar a jae jaajaja y quien sera que los descudrio al yunjae en accion gracias annie
ResponderBorrarQue lindo ambos ...yunho no puede soltar a su Boo xD!!! CM ...ingresooo sii ^~^ ...quien?? Tomo esas fotos >~>
ResponderBorrarEs tanto su amor y deseoque no midieron las consecuencias y en todo mundo hay vivales.
ResponderBorrarGracias!!!