Capítulo 6
―¿Ayuda? ―el rubio enarcaba una ceja―¿De mí? ¿Por qué? La
rechazaste justo cuando trataba de ofrecértela ―pasó ladeando al castaño para
sacar las llaves de su casa―.
―Lo se, y lo siento… ―el chico se acercó tras el rubio y
colocó una de sus manos sobre su hombro haciendo que éste cerrara los ojos y
soltara las llaves―. ¿Estas bien?
―¿Es todo lo que tenías que decirme? ―contestó seriamente
sin abrir los ojos―.
―Jaejoong…hablo en serio ―el rubio abrió repentinamente los
ojos y volteó para mirarlo de frente―.
―Yo también estoy hablando en serio Yunho ―inmediatamente
después se inclina un poco para recoger las llaves que estaban en el suelo―…si
me disculpas ―nuevamente le da la espalda al castaño para insertar las llaves
en la puerta y abrirla―, tengo cosas que hacer en casa.
Seguido se de esto, Jaejoong logra abrir la puerta de su
casa y entra cerrando la puerta dejando al castaño con la boca abierta.
―Jaejoong…escúchame ―esperaba una respuesta, pero no la
había hallado―, yo…quería pedir una disculpa…sí, actué mal ¿Ok? Es que…―el castaño suspiró y bajó la mirada,
sentía como si hablara solo―.
Se encontraba de pie frente a la puerta, golpeando en
repetidas veces para que aquel rubio lo escuchara, pero sentía que su paciencia
llegaba a su fin; de pronto la puerta se abrió levemente y el rubio solamente
asomó la cabeza.
―Es que ¿qué? Yunho ―murmuró levemente―.
―Ya no tengo el valor Jaejoong… no tengo fuerzas para
hacerlo.
El rubio se percató de que las manos del castaño formaban
dos pequeños puños.
―Yunho… ―alcanzó a decir el rubio para luego hacerlo pasar en
su casa―.
Una vez dentro de la casa, acompañados de una taza de café y
sentados uno frente al otro, el rubio escuchaba atentamente a su castaño, quien
le contó todo lo que había vivido con su amada Ha-Neul, dándose cuenta de que,
en efecto, la amaba, la amaba más de lo que el mismo ha podido imaginar, que
realmente se había aferrado a ella, pues cuando mencionaba su nombre, sus ojos
tenían un brillo especial, mas sin embargo, cuando su historia avanzaba más, su
rostro cambiaba y mostraba frustración,
tristeza, hasta llegar al borde de las lágrimas cuando mencionaba todo
lo que había pasado con ella a tan solo meses de fallecer, haciendo todo lo que
ella le pedía, complaciéndola para que pudiese ir al cielo con una gran sonrisa
dibujada en esos labios que tanto le gustaban.
―Cuando ella estaba conmigo…era mi todo ―suspiraba
tristemente el castaño―, era mi motor, era lo único que yo necesitaba para
poder estar vivo, ahora es…tan diferente …Jaejoong ―sus ojos se habían
cristalizado nuevamente―, ella era mi motivo para hacer música.
―Yunho ―miraba al castaño con ternura, pues sus
palabras lo habían conmovido―, entiendo
que es muy duro lo que ha pasado y también que la extrañas mucho, pero debes
darte otra oportunidad, es decir, ella ya está en un lugar mejor. Piensa en
ello, ella seguramente no quiere verte sufrir.
―La extraño mucho…
―Yo lo sé, yo lo sé ―se acercó levemente y acariciaba el
cabello del mayor, haciendo que éste enarcara la ceja levemente sorprendido―, pero
así es la vida Yunho, no siempre las personas a las que te aferras se quedarán
contigo toda la vida, tienes que seguir tu propio destino. Mereces vivir mucho
tiempo más, ella ahora no está pero tienes motivos suficientes para estar vivo,
la música te aclama Yunho, no te alejes de ella.
―Si no he dejado la escuela de música es precisamente por
ella, es una promesa que no puedo romper, no abandonaré la música Jaejoong.
Cada vez que yo escribo una melodía, cada vez que yo piso un escenario, cada
vez que miro al cielo, la busco a ella, a mi musa inspiradora.
El rubio sonreía levemente al escuchar sus palabras.
―Jamás había conocido a un hombre tan enamorado. Incluso te
vuelves poeta cada vez que te expresas refiriéndote a ella.
―Se lo debo a ella ―sonrió levemente entre lágrimas―, todo
lo que soy es gracias a ella.
―Pero ahora, así como me has dicho que ella es tu
inspiración, no la dejes, quiero decir, si ella es tu inspiración, tómala, pero
no te aferres demasiado Yunho, ya te lo dije, tienes una vida por delante y no
quiero que te dañes más por su ausencia. Piensa en lo que te había dicho en la
Academia, seguramente no entraste al equipo por ayudar a Junsu, pero ¿Te has
puesto a pensar en las emergencias que pudiesen ocurrir?
―De hecho, mis planes en un principio no eran los que tengo
ahora
―¿Qué quieres decir con eso?
―Verás yo, cuando escuché tu voz aquel día, me quedé
sorprendido ―el rubio se sonrojó levemente al escucharlo, era un pequeño
halago, pero era lo que él necesitaba para sonreír infinitamente―, yo no tenía
previsto el concurso, pero cuando la convocatoria llegó, pensé en tomarte como
parte del equipo, de mi equipo.
―¿Pensabas tan solo en llamarme y dejar a mis amigos a su
suerte? ―el castaño asintió pesadamente―, ¿Por qué?
―Cuestión de estrategia, Jaejoong. Tu eres la mejor voz de
la Academia, y lo digo en serio. Yo he sido reconocido al igual que tu, sin
embargo, en mi caso, son los instrumentos musicales. Es decir, pensándolo
ampliamente tu y yo podemos hacer una gran mancuerna, fácilmente ganaríamos el
concurso. Fusionar tu voz con los acordes del cello es algo en lo que pensé
seriamente y sería maravilloso si se intentara. Junsu también tiene una
excelente voz, si combinamos tus matices vocales con los de él con algo de
piano en una melodía con ritmos suaves, sería algo completamente delicioso al
oído humano: la perfección auditiva en persona.
―Es decir, solo pensabas en lo mejor para ti.
―Piénsalo Jaejoong, sería perfecto. La carrera discográfica
de los tres estaría completa, juntos podemos intentar nuevas cosas, además…
―Pero las cosas no son así Yunho ―el rubio interrumpe de
pronto―, yo no pienso dejar a mis nuevos amigos, ni aún pensando todo lo que me
dijiste, lo cual sería absolutamente fabuloso musicalmente hablando, sin
embargo, fue un lindo gesto el no aceptar tu lugar en mi grupo para no dejar a
tu amigo, que por cierto me dijeron que era algo…especial.
―¿Junsu? Solamente no habla mucho con los demás, desde hace
tiempo que es así, solo habla conmigo, no suele confiar mucho en los demás.
―¿Por qué?
―Por cosas que le sucedieron años atrás, pero creo que no es
mi deber contártelo ahora.
Jaejoong asiente y observa detenidamente al castaño mientras
bebe un poco de café.
―Vayamos al grano Jung Yunho ―expira lentamente para luego
mirar al contrario a los ojos―, ¿Qué es lo que exactamente necesitas de mi?
―Verás, después de la clase de instrumental hablé un poco
con la profesora sobre el requerimiento de voces para el grupo que ingrese al
concurso. Es necesario que al menos dos personas canten en todo el grupo. ―el
rubio asiente esuchandolo― Solo somos Junsu y yo. Jaejoong, debo cantar, o
hacer el intento.
―¿Y por qué vienes hasta mi? Tenemos profesores de canto en
la Academia
―Porque tu tienes una voz excelsa, ¿Quién mejor que tú para
asesorarme? ―no obtenía una respuesta, tan solo el silencio del contrario,
quien miraba fijamente su taza de café―. Incluso te pagaré.
Ahora era cuando Jaejoong pasaba por un dilema, no podía
responder en ese momento, pues su cerebro entraba en discusión, ahora era uno
de esos momentos en las que una decisión era crucial.
Por una parte, Jung Yunho, el chico que había robado su
atención, estaba en su casa pidiéndole ayuda, es decir, pensar en unas clases
privadas de canto, ayudaría no solo al castaño a sacar su voz, sino también
podría emplear bien una parte de ese tiempo para poder conocerlo más.
Por otro lado, al aceptar el trato, estaría ayudando a “la
competencia”, pues esto era un concurso, y el premio era bastante atractivo,
sin embargo, él sentía que lo más importante era la capacitación en la
Academia, es decir, el concurso él lo veía como algo divertido, pero sus
compañeros lo tomaban muy en serio.
Sin embargo, él solo pensaba en la forma de conocer más a
Yunho, no quería desperdiciar la posible oportunidad que se le presentaba justo
en sus narices, además de que, ayudarlo le daría un crédito muy especial, ya
que, aún sabiendo que nunca llegarán a ser algo, de alguna forma siempre le
estará agradecido por ayudarlo a descubrir uno de los talentos que temía
mostrar.
Era una decisión muy complicada, por lo que dándole otro
sorbo a su café, y después de relamarse un poco los labios por el sabor del
mismo, una vez dejando la taza sobre la mesa, se cruzó de brazos sobre ésta y
mirando a los ojos a Yunho solamente pronunció.
―La Academia no debe saber de esto.
―Seré como una tumba, Jaejoong ―respondió enseguida, por lo
que el contrario asintió―.
―Esta bien, lo haré.
―¿En verdad lo harás? ―el rubio asintió nuevamente―, oh
muchas gracias, en verdad. Y , ¿de cuanto estaremos hablando?
―Luego discutiremos eso. El concurso es en un par de meses y
debemos llevar las canciones a interpretar en el transcurso de esta semana, ¿Ya
tienes tu canción?
―Aún no, de hecho, quería pedirte ayuda en eso.
―De acuerdo, mañana regresa y trae las canciones que tengas,
luego checaremos cuales te convienen de acuerdo a tu timbre vocal.
El castaño entendió la situación y una vez puestos de
acuerdo en algo, se despidió de Jaejoong para así salir de su casa, estaba
motivado, pues sabía que una de las mejores voces de la Academia de Artes
Musicales sería el encargado de su formación vocal, cosa que lo hacía sentirse
orgulloso y al mismo tiempo agradecido.
―Esto será más difícil de lo que pensé.
Jaejoong se encontraba en el salón, revisaba detenidamente
las canciones que Yunho le había dejado minutos atrás, era una carpeta
prácticamente gruesa por el contenido que tenía.
―Las canciones son muy altas ―murmuraba en voz alta―,
necesito ver hasta donde llega.
Por otro lado, el rubio notaba que Yunho había compuesto las
canciones que contenían esa carpeta, por lo que se mostró interesado y comenzó
a leer la letra detenidamente conmoviéndose no solamente por lo bien que el
mayor escribía, sino porque claramente en las letras refleja sus sentimientos
hacía su amada, así como también el
repentino cambio de animo conforme pasaba el tiempo.
Sin pensarlo, enseguida tomó lápiz y papel comenzando a
escribir sin que nadie ni nada lo detenga.
Las horas habían pasado, Jaejoong se encontraba en casa
después de un ensayo con su grupo en la Academia, había preparado un par de
aperitivos, pues amaba la cocina, al grado de que si no se dedicara a la
música,sin duda se especializaría en gastronomía.
La casa estaba limpia, el rubio había hecho una ligera
selección de canciones que posiblemente serían de utilidad para Yunho, pero
bastaba con confirmar. No contaba con un piano en casa, por lo que utilizaba
una aplicación en la computadora para poder tocar. En efecto, todo estaba
listo, era cuestión de esperar a aquel hermoso castaño, quien sería su alumno
especial.
Los minutos pasaban y el rubio estaba algo inquieto, por lo
que decidió abrir la puerta dejando entrar el fresco aire de la tarde, quizás
eso necesitaba para sentirse pleno, recostado en el sofá, mirando hacia el
techo imaginando que tanto podrían hacer en clases, su celular comenzaba a
sonar en el cuarto, haciendo que el rubio se levante y corra hacia ese lugar
contestando su llamada, desgraciadamente, no era quien él esperaba, por lo que
frustrado y mirando al suelo mientras se encontraba sentado en el colchón de su
cama, pensaba en la posibilidad de que ese chico especial no viniese, una brisa
de aire entró por la ventana haciendo que de uno de los cuadernos de Jaejoong
escaparan un par de hojas en blanco, las cuales tenían diversos apuntes a mano,
corrió un poco antes de perderlos bajo uno de los roperos y tomando las hojas,
sonreía levemente mientras se acercaba a su computadora y abría aquella
aplicación para producir música, comenzó a mover algunos botones, mediante
clics comenzaba a configurar la posible melodía y la dejó correr, mientras el
levemente seguía la letra de la canción que había compuesto ese mismo día en
clases.
Mientras cantaba, el rubio pareciese como si se proyectara
en cada palabra, en cada oración, en cada verso, es como si viviese una
historia, su historia. Cerraba de vez en cuando los ojos al cantar, al ser una
composición suya, era evidente la memorización de lo que escribió.
Sus dedos se concentraban en tocar las notas y acordes de
piano requeridos para la melodía mientras que ya estaban pre-configurados los
efectos, por lo que además de tocar,el solamente respiraba profundamente para
cantar frente a la computadora.
El cuarto de Kim Jaejoong estaba rodeado de libros de
literatura y poemas, suponemos que por ello es tan bueno componiendo. Por otra
parte, mientras la magía ocurría en aquel cuarto, en la calle, un carro blanco
se asomaba para estacionarse en la casa del ya popular Kim Jaejoong.
Vestido de manera casual, Jung Yunho caminaba hacia la
puerta de la casa del joven rubio, sorprendiéndose de que estuviera abierta, lo
cual le preocupó un poco, sin embargo, escuchó el sonido de un piano y la voz
de Jaejoong, lo cual lo hizo sonreír al instante, por lo que instintivamente
sube las escaleras de la casa después de atravesar la sala, siguiendo el
armonioso sonido de la voz del rubio y entonces lo encontró, con los ojos
cerrados cantando frente a la computadora, mientras tocaba el piano con el
teclado de la computadora gracias a su aplicación.
Yunho escuchaba detenidamente la letra de la canción y al
mismo tiempo observaba las acciones del menor al cantar, al igual que la manera
de cantar, el sentimiento.
De pronto, en medio de la canción, el castaño se sorprendía
no solo del sentimiento que podía transmitir, pues comenzó a sentirse algo
deprimido, recordando viejas cosas, y al mismo tiempo, también se sorprendía de
las notas agudas que podía dar el rubio al cantar, no cabe duda que su voz era
más que impresionante.
Después de concluir la canción, el rubio abría lentamente
los ojos, mientras que, frente a él, Yunho se encontraba aplaudiendo la nueva
canción creada por el mismísimo Kim Jaejoong. Haciendo que éste se sobresalte
un poco, puesto que no había notado su llegada.
―Sabía que no me equivoqué al buscarte ―asentía el joven
castaño mientras una ligera sonrisa se formaba en sus labios―.
YH ano demasiado a su enamorada , pero es momento de continuar con su vida que bueno que jae este ahora en su camino ^=^… -profesor privado… una dificil de tonar pero jae por conocer mas a YH lo ha tomado ^=^ me gusta como se esta dando la historia esperare por los demas capitulos gracias por compartirlos ^=^
ResponderBorrarJae no desistas, mantente a su lado.
ResponderBorrarGracias