Capítulo 1
Cerraba los ojos mientras aquellas tijeras ejecutaban su
función en mi cabello, no quería lucir tan mal para el “gran día”. En realidad
yo no deseaba que ese día llegara, pero no me quedaba de otra, es una
obligación, una honorable obligación que todo hombre coreano debe cumplir de
manera honrada.
Sin embargo, a pesar de todo ello muchas preguntas llegaban a
mi mente, ¿Realmente estoy listo para esto? ¿Por qué tenía que pasar el tiempo
tan rápido? ¿Será algo muy difícil?
Preparaba mi mente para el proceso que a continuación
realizaré, puesto que previamente ya había entrenado un poco mi cuerpo con
ejercicio físico para mantenerme en forma, ya que serán muchos días de absoluto
y total entrenamiento.
Tan pronto como procesaba lo que me espera, escuchaba en mi
mente aquellas voces que horas antes me daban ánimos y al mismo tiempo me
hicieron doblegarme ante los sentimientos de angustia que me inundaban. Sollocé
.
Entonces me odiaba por dentro al darme cuenta que nuevamente
mi sensible corazón hacía expresar mi sentir, abrí los ojos contemplando al
nuevo chico que tenía frente a mi, con el cabello corto, facciones finas, pero
una mirada, que por desgracia solo irradiaba una cosa. Tristeza.
El miedo a la soledad y al futuro deparador era lo que mis
cristalizados ojos expresaban. No. No debes llorar. Ya no eres más un niño. Hoy
ya no serás más un idol. Hoy solamente serás tú. Kim Jae Joong. Corrección,
Soldado Kim Jae Joong.
Respiré profundamente mientras observaba mi imagen, para
luego hacer una última cosa, mostrarle a mis admiradores que no deben temer a
lo que suceda. Envié un breve mensaje y tomé un par de fotografías para luego
enviar una más del cabello que perdí. Ahora su “idol” se ha vuelto un chico de
la armada.
Observe las fotografías que mandé, y concentrándome en como
habían salido mis ojos, negué con la cabeza. Patético. ¿Cómo crees que
reaccionarán los demás?
Se supone que no debo mostrarme triste, es un gran paso para
mí, incluso mi padre esta muy orgulloso ahora. Suspiré recordando a mi sobrina
que lloraba antes de aquel ultimo concierto, pensaba que hoy me enlistaría,
pero en realidad será el día de mañana. Pobre pequeña, la angustia que mostraban
esos ojitos brillantes, tan inocentes.
No dejaré de agradecer a todas esas personas que estuvieron
conmigo, no solamente en el concierto, sino también en la fiesta. Incluso me
duele un poco la cabeza, bebí demasiado debo admitirlo. Necesitaba mostrarme
amigable y divertido ante ellos, pues repito. No es un día para llorar sino
para enorgullecerse.
Pensaba en esto cuando el teléfono comenzó a vibrar, una
llamada entraba y debía contestar.
—Tú… —sonreí al instante y la angustia venía a mi
nuevamente—.
—¿Cómo has estado? ¿El concierto terminó bien?
—Sí. Todo salió bien, estoy contento.
—No me gusta que mientas, te escuchas mal.
—En verdad estoy bien, es sólo que aún tengo muchas preguntas
en mente.
—Te dije que no pensaras en ello. —escuché un largo suspiro
al otro lado de la línea— Lloraste, ¿cierto?
Odiaba eso. El conocerme tan bien, que incluso a una larga
distancia pueda detectar mi sentir. Exhalé profundamente.
—Eso lo tomaré como un sí.
—Mañana será la ceremonia de enlistamiento y…
—No podré asistir.
—¡Tu mismo me dijiste que tenías libre la agenda! —protesté—.
—Se perfectamente lo que te dije, pero no podré estar
contigo. Lo siento.
—Pero tú… —callé al sentir como mi voz se quebraba. No. No de
nuevo—.
—Jaeboo… —sollozaba al escucharlo—. Escúchame con atención.
Esto no es cuestión mía. Los medios seguramente estarán ahí y yo…
—Yo pedí exclusivamente que no quiero a nadie. Incluso a los
fans les pedí que no fueran a despedirme, yo…yo solo quiero que sea tu rostro
lo último que vea antes de irme.
—Ellas estarán ahí aunque tu no lo quieras. La prensa
también, Jae no puedo arriesgarme, no aún. Si ellas o los medios notan mi
presencia, seguramente la agencia me sancionará. Tu y yo sabemos perfectamente
lo difícil y complejo que es el vernos, sobre todo en estos últimos cinco años.
—¿No puedes venir ahora?
—No puedo. Estamos en ensayo para el concierto en Japón —mis
sollozos se escuchaban por la bocina del teléfono—. No llores. Sabes que no me
gusta verte así.
—¿Por qué es tan difícil esto? No estoy listo aún. ¡No puedo!
—mi voz se quebraba soltando todo lo que había acumulado horas antes—.
—No digas eso. Eres ahora un soldado. Los soldados no deben
llorar, ellos son fuertes y valientes. Jaejoong, estarás ahora en entrenamiento
por defender al país y tú no debes mostrarte débil ante eso.
—Estaré solo.
—Tus compañeros de grupo también estarán ahí, no ahora, pero
se que lo estarán.
—Espero que me dejen verlos, en verdad este tiempo no será lo
mismo. Voy a extrañarlos. Voy a extrañarte a ti mas que a nada.
—Tampoco será fácil para mi. Y también voy a extrañarte más
de lo que imaginas. —sonreí ante eso. Era todo lo que necesitaba—.
—Debo colgar
—¿Ahora? ¿Por qué?
—Max y yo debemos ensayar, los bailarines han llegado y
debemos comenzar ahora.
—Pero…
—Cuídate mucho. ¡Lo harás bien!
—¡Regresaré pronto! —traté de sonreír en el teléfono, pero
era algo imposible—.
—¡Fighting!
—¡Fighting!
Entonces colgó. Lo que solamente hizo que mis lágrimas
aumentaran. Tan solo quería que esto pase lo más pronto posible.
que pena que yunho no pudo estar para es pedir a jae y mi jae todo pesaroso por su partida gracias por el capitlo
ResponderBorrarque pena que yunho no pudo estar para es pedir a jae y mi jae todo pesaroso por su partida gracias por el capitlo
ResponderBorrarQue triste que no pudieron verse antes que Jae entrará en el ejército
ResponderBorrarGracias!!!